lunes, 29 de abril de 2013

TALLERES CREATIVOS CICLADOS EN LA ESCUELA PRIMARIA


TALLERES CREATIVOS CICLADOS EN LA ESCUELA PRIMARIA

Una propuesta para formar sujetos críticos

Nuestra experiencia en la escuela no dice que ésta ya no puede limitarse a proveer conocimiento, sino que debe ayudar a construir subjetividad. El niño no es objeto de conocimiento: es sujeto que tiene que construir conocimiento con sentido. La escuela tiene que ayudar a construir subjetividad, armando redes, construyendo colectivos. Pero tenemos que empezar por construir subjetividad entre los docentes, en la escuela, para poder luego hacerlo con los otros.
Frente a las dificultades que aparecen en la escuela actual con las nuevas infancias que recibimos en ella, se intensifica la búsqueda de soluciones para incluir a todos y todas, en el marco del sistema educativo que tenemos.
Una de las dificultades más grandes que vemos en algunas escuelas es el desinterés que presentan los alumnos por la tarea que se realiza en la escuela y por los temas que se abordan en ella.
Es por eso que comenzamos a pensar en la posibilidad de trabajar con los chicos en una organización diferente que en principio los acerque a la cultura escolar, aproximando la escuela a la realidad que perciben cotidianamente, pero también pensando en una organización que permita flexibilizar los marcos temporales de los procesos de aprendizaje, respetando la diversidad de puntos de partida y de estilos de aprendizaje, las perspectivas procesuales de la enseñanza y el aprendizaje para que a partir de los intereses de los alumnos estos procesos sean más fluidos. Por último nos interesaba  conformar equipos docentes que asuman la responsabilidad por los resultados.
Existen ya en nuestro sistema educativo algunas experiencias de escuela ciclada o de momentos de enseñanza ciclada tanto en escuelas públicas como privadas. Esta propuesta retoma la idea de obviar la gradación en algunos momentos del tránsito por la escuela para lograr resultados diferentes.
A partir de este trabajo buscamos entonces herramientas para el mejor aprovechamiento del tiempo considerando como eje el fomento de trabajo en equipo desde los docentes en los talleres curriculares. Esta idea implica pensar que los maestros tienen saberes y motivaciones diversas que permiten recrear los contenidos curriculares a partir de propuestas abiertas, con tiempos flexibles, que permiten la profundización de algunos temas, la focalización de problemas o simplemente el abordaje desde un nuevo lugar para promover el “aprender a aprender” que hoy priorizamos en la escuela.
La propuesta entonces supone que cada maestro organice su oferta en función de sus intereses y posibilidades destinando un bloque de trabajo semanal a que los alumnos participen en los talleres.
La posibilidad de trabajar por ciclos abona la idea de que los chicos compartan clases con alumnos de otros grados, eligiendo los talleres según sus propios intereses. Si bien estos talleres pueden incluir contenidos curriculares, también es deseable que existan otras situaciones donde las temáticas se definan al margen de las áreas que integran el curriculum. Esto puede aparecer  en principio como un distractor de la tarea escolar, pero si pensamos en la idea de “aprender a aprender”, donde el contenido resulta ser una excusa para aprender procedimientos, fomentando la curiosidad por el aprendizaje, esta idea cambia y se convierte en un espacio creativo que permite el desarrollo personal de los alumnos.
Sabemos que nuestros chicos llegan al aula con diversos estímulos, muy dispares a veces, y la posibilidad de tomar decisiones sobre su propio aprendizaje puede ser altamente enriquecedora para su tránsito por la escuela.

Notamos entonces que se hace necesaria una nueva organización de los tiempos y los espacios para interesar a nuestros alumnos pero también para promover en ellos la participación activa como futuros ciudadanos. Consideramos que generando nuevos vínculos en nuevos espacios de trabajo, con modalidades diversas los convocaremos y al mismo tiempo formaremos ciudadanos responsables, activos y comprometidos con su tiempo.
Frente a esta perspectiva, proponemos el armado de Talleres curriculares teniendo en cuenta los diferentes saberes y motivaciones con que cuentan los docentes, quienes seguramente se comprometerán rápidamente con el proyecto ya que experimentarán la posibilidad de lograr mayores aprendizajes.

Los talleres en acción.

Pensar en realizar talleres ciclados implica reflexionar sobre la posibilidad de hacer actividades que chicos de edades variadas puedan llevar adelante sin sentirse frustrados, sin sentir que otros harán por ellos lo que ellos no puedan llevar a cabo. En el caso del primer ciclo tendremos muy en cuenta entonces que las propuestas sean posibles tanto para 1º grado como para 3º y que todos puedan acompañar los procesos. El andamiaje que entre ellos puedan realizar es la riqueza de este trabajo.
La cantidad de talleres dependerá de los docentes dispuestos a llevarlos adelante. En ocasiones algunos docentes curriculares deciden participar con propuestas muy interesantes, otras veces sucede que dos docentes de grado no se animan a hacerlo solos y eligen trabajar juntos. Es importante tener en cuenta que cuantos más talleres armemos más posibilidades de elegir y menos chicos tendremos en cada taller, lo cual optimiza la tarea.
Algunos de los talleres en los que tuve la fortuna de acompañar y participar, como docente y como parte de la conducción de algunas escuelas son:

Cerámica
Cocina
Carpintería
Experimentos
Juegos
Cuentos
Narración
Teatro
Música
Títeres
Folklore
Baile
Cine
Artesanías
Telares
Tejidos
Bricolaje
Cestería

Para lograr la atención de los chicos es conveniente promover los talleres una semana antes de comenzar. Cada maestro lo anunciará, lo promocionará para dar tiempo a los chicos a que tomen sus decisiones.

Para realizar la elección de talleres considerando que se deben armar grupos de cantidades homogéneas tendremos en cuenta que pudiera suceder que no se respetara el deseo de todos. Para evitar problemas en ese sentido se les pedirá que elijan dos opciones, poniendo en primer lugar la que más les guste.
De esa forma se armarán los grupos, registrando quienes serán colocados en el taller de su segunda opción cuando se hubieran cubierto todos los cupos en algún taller, para priorizar a esos alumnos en el segundo trimestre donde se repetirá la actividad.

Es importante hacer notar que este trabajo se puede realizar en los dos ciclos de la escuela aunque seguramente se verán algunas diferencias según los docentes que los integren.
Las modalidades pueden variar. Se pueden organizar talleres cuatrimestrales, bimestrales e incluso decidir hacer un período de prueba de un mes, es decir cuatro encuentros, para ver cómo se sienten con respecto a una modalidad desconocida tanto para los docentes como para los alumnos. Una vez que vean las ventajas de este tipo de trabajo y la alegría con que sus alumnos esperarán el taller, seguramente organizarán nuevos talleres que desarrollarán en un segundo momento.
Es importante encontrar un bloque dentro de la semana donde todos los grados que participen encuentren el tiempo adecuado, es decir que no tengan materias especiales sino que sean momentos donde los chicos estén con el docente de grado. Quizás sea necesario hacer algunos cambios de horarios para que esto sea posible.
A continuación les ofrecemos algunas de las propuestas de docentes que ya llevaron a cabo talleres con esta modalidad ciclada. Los formatos son diferentes, pero todos con las mismas ganas de aprender enseñando.

En el primer ciclo:

Taller de cestería
(Taller a cargo de la docente Cecilia Uehara)
Fundamentación.
Detrás del cumplimiento de aquellos contenidos que entendemos “obligatorios” -con más o menos intensión- muchas veces restamos importancia al desarrollo de otras potencialidades que traen los chicos o que aún se encuentran ocultas.
Muchas experiencias que podrían acompañar y enriquecer los aprendizajes van quedando de lado a lo largo del año. Los tiempos institucionales resultan más rígidos y menos maleables que el ritmo de aprendizaje de los chicos.
Actividades teórico prácticas más relacionadas al desarrollo de conocimientos lógico matemático y lingüístico ocupan el podio en la escolaridad primaria mientras que aquellas que traían los chicos de su paso por el nivel inicial, van quedando en el desuso. Estas que a los chicos solía generarles tanto entusiasmo –quizás porque se sentían más libres y el “error” no estaba tan mal visto-, ocupan muchas veces el último escalón en la actividad diaria.
Sin embargo, en ocasiones en que necesitamos que pongan en práctica esas habilidades, nos encontramos con que ya no pintan con el mismo entusiasmo, nos sorprendemos con los dibujos garabateados, con lo complicado que resulta una actividad que requiere un determinado desarrollo de motricidad fina -como la escritura diaria-, con el tiempo que demanda el uso de la tijera o el manejo del espacio en los grados superiores.
Estas observaciones no se registran en todos los chicos, claro. Pero vivimos en tiempos en que las actividades  -incluso las recreativas- de los chicos, cada vez demandan menos uso de las manos. Son expertos usando el mouse de la netbook  -cosa que a muchos adultos nos cuesta- pero plegar un papel, usar una tijera, hasta hacer torres con bloques, ya requiere otra paciencia y otra práctica.
Objetivos.
La propuesta del taller de cestería pretende darle un espacio más al trabajo con las manos. Que los chicos puedan sentir que las manos siguen siendo una herramienta tecnológica fundamental en el ser humano;  que así es y fue en todos los lugares del mundo.
Que el trabajo con las manos los divierta y recree –así como los adultos buscamos el tejido, la cerámica y otras actividades para relajarnos de tensiones y recrearnos-.
Que puedan poner en práctica sus habilidades manuales y ver el producto de ellos mismos.
Que reconozcan en la práctica la utilidad e importancia que tiene y ha tenido la producción artesanal.
Que sean capaces de valorar y respetar el trabajo realizado por los otros.

Contenidos
Sociedades y culturas.
·         Establecimiento de relaciones entre valores, creencias y costumbres de familias en contextos sociales diferentes –de distintos ingresos económicos, urbanos y rurales.
·         Identificación de la coexistencia de aspectos comunes de la cultura actual y aspectos singulares que se conservan de los respectivos orígenes. Observación de objetos y lugares para rastrear aspectos de la cultura que están presentes en ellos.
Trabajos y técnicas.
·         Reconocimiento de que los objetos son el resultado de múltiples ideas y trabajos.
·         Identificación de los trabajos en la vida familiar; análisis de distintas formas de distribuirlos y de los estereotipos acerca de los trabajos de los hombres y mujeres. Reconocimiento de cambios y permanencias.
·         Identificación de los materiales sobre los cuales trabajan y de los productos que realizan.
·         Reconocimiento de diferencias entre la producción artesanal y la industrial en función de las características de la producción por la semejanza de los productos y la cantidad de producción.
·         Reconocimiento de las acciones realizadas sobre los materiales para su transformación.
·         Identificación de las características de las herramientas empleadas, de los conocimientos y las habilidades puestas en juego al hacer las producciones.
·         Análisis de las construcciones como un ensamblado en distintas partes.
·         Caracterización de los materiales utilizados en las construcciones de acuerdo con la resistencia, rigidez o flexibilidad.
·         Comparaciones de dimensiones con respecto a un patrón para controlar el resultado de un proceso de producción (en este caso, tamaño de las tiras a utilizar).
·         Identificación de las formas en que las personas logran reproducir las técnicas a través de instructivos (dibujos y gráficos, transmisión oral o escrita).
Pasado y presente
·         Formulación de preguntas acerca de los objetos de una cultura. Establecimiento de conjeturas acerca de la relación de esos objetos y la forma de vida de esa sociedad.
·         Comparación entre formas de producción del pasado y formas de producción actuales –artesanal, casera, industrial-, con relación a las técnicas utilizadas   
Desarrollo de actividades.
Narración de leyendas guaraníes.
Presentación de imágenes e introducción que contextualice esta práctica.
Se trabajará con papel de diario y pegamento.

En el segundo ciclo:
TALLER : “JUEGOS DE AYER, HOY Y SIEMPRE”.
(Taller a cargo de las docentes Lorena Marinucci y Magalí Ríos)
FUNDAMENTACIÓN.
A través de la historia de la humanidad, la idea de juego se encuentra indisolublemente ligada a la del aprendizaje, mucho antes de que la escuela existiera tal y como la conocemos en nuestros días.
 El juego es una de las actividades más relevantes que realizan los niños. Pero tanto el concepto de juego como el  de escuela pueden ser entendidos desde diferentes ópticas, condicionadas por el contexto socio histórico, así como también por las concepciones de infancia y poder.
En este curso taller cada participante podrá definir a partir del análisis de su práctica y de su entorno, estrategias para mejorar la calidad lúdica y el tiempo de óseo en función de otorgarle al juego un tiempo y un espacio concreto, con una mirada renovada de su accionar.
El desafío es ir más allá, cuestionar la idea de que sólo se juega en el jardín, y lograr que nuestros alumnos y alumnas, puedan proyectar la riqueza del juego como fuente inagotable de recursos, estímulos y aprendizajes significativos.
Nos proponemos revalorizar los juegos populares generacionales.
Encuentros:
Primer encuentro: Generala gigante. (CAJAS CUADRADAS  DE CARTON, PAPEL AFICHE, CINTA ANCHA TRANSPARENTE, TIJERAS, PLASTICOLAS.)
Segundo encuentro: Ponerle la cola al burro.(10 planchas de telgopor, 10 afiches, chinches,  10 cintas bebé anchas de 50 cm de largo)
Tercer encuentro:  Tinenti. (telas de colores, un puñado de arroz, hilo, aguja, tijera, dedal.)
Cuarto encuentro: bowling .( 50 botellas de jugo mocoreta o cepita vacias, arena, cinta de embalar color marron muchas!!!tipo 30, 50 pelotas de telgopor de aprox. 8cm de diámetro, 5 pelotas de goma livianas)
Bibliografia
·         DGCyE, Diseño curricular para la Educación primaria, Provincia de Buenos Aires (Primer Ciclo)
·         DGCyE, Diseño curricular para la Educación primaria, Provincia de Buenos Aires (Segundo Ciclo)
·         Marco General de Política Curricular Niveles y Modalidades del Sistema Educativo Resolución Nº 3655/07° 1
·         Diseño Curricular para la Escuela Primaria de la Ciudad de Buenos Aires, 2004
·         “Escribir las prácticas: relatos de experiencias de gestión curricular y evaluación de los aprendizajes en la Ciudad de Buenos Aires”
·         VELA Lorie, “¿Qué es el aprendizaje colaborativo?”. Disponible en:


jueves, 11 de abril de 2013

Las nuevas infancias y los medios didácticos


NUEVAS INFANCIAS PARA NUEVOS MEDIOS DIDÁCTICOS
“Con cada nacimiento algo singularmente nuevo entra en el mundo”
Hannah Arendt
En la última década, con la difusión los nuevos medios de comunicación digitales, las nuevas tecnologías, se han producido grandes cambios en la vida personal, laboral, a nivel grupal y social. Con este nuevo escenario, la educación también se ve inmersa en una nueva realidad y debe transformarse para subsistir. Aparecen así cambios en las formas de circulación y apropiación del conocimiento, cambios que implican otros modos de intervención docente y construcción de nuevos espacios educativos en línea, por ejemplo.
Estos cambios han comenzado a generar expectativas y demandas múltiples hacia el Estado, los sistemas de enseñanza y los docentes. Asimismo, plantean nuevos desafíos educativos y de gestión del conocimiento a diversos tipos de organizaciones.
En las sociedades modernas se cree que el niño al nacer trae consigo algo nuevo. Jorge Larrosa dice que un niño  que nace es “algo otro”. No podemos saber cómo serán esos nuevos niños que llegan al mundo pero como adultos intentamos por todos los medios reducir esas diferencias, educándolos para convertir a cada niño en uno de nosotros. Entonces dejan de ser una amenaza para convertirse en la esperanza de la continuidad como aporta Gabriela Diker.
“Como efecto de diversos procesos… hoy se registran cambios muy profundos en el modo en que los “nuevos” ingresan al mundo y en el modo en que el mundo les es presentado…hoy hay miles de pantallas presentando una infinidad de mundos (reales o virtuales, poco importa) a los que los niños llegan y de los que participan sin la intermediación adulta; al mismo tiempo fuera de las pantallas hay un mundo que tampoco parece tener porteros, ni discursos de bienvenida, ni gestos de recepción, en el que no hay lugar para todos, y en el que una parte de la infancia se configura, en palabras de Violeta Núñez, como resto, ya no en el sentido metafórico, sino como resto material de un mundo que no les hace lugar. En este escenario los adultos nos mostramos, además, cada vez menos convencidos acerca de cuál es “nuestro mundo” y cuál es nuestro lugar en él; cada vez con mayor frecuencia nos encontramos situados en el lugar del no saber que reservábamos a los niños, sin entender, cual es el mundo en el que vivimos y por el que, se supone, deberíamos responder. …como generación nos mostramos a veces impotentes y a veces indiferentes frente a la brutal fragmentación social que en las ultimas décadas ha encontrado en los niños sus principales víctimas, y que, condena a buena parte de la población infantil a la exclusión.
Y aunque sostenemos todavía (en las familias, en las escuelas) el gesto de la trasmisión, éste resulta ineficaz si no podemos reconocer que habitamos un mundo común y si no podemos asumir la responsabilidad de recibir a los que llegan a él”.
“…si hoy la infancia nos sorprende de una manera particular es también porque conmueve las certezas que históricamente habíamos construido acerca de cómo los niños son y deben ser, acerca de lo que harán en su devenir con el mundo y en él. En efecto, llevamos por lo menos tres siglos produciendo un saber acerca de la infancia con el propósito de-a pesar de las advertencias de la filosofía- despejar todo enigma, anticipar la novedad y controlar sus efectos. Hoy ese saber se muestra ineficaz para dar cuenta de la multiplicidad de modos de transitar la infancia, de las maneras particulares en que tiene lugar el devenir infantil”.
“… alguna vez dispusimos de un saber que ocupó el lugar de esa certeza y que sostuvo una fenomenal maquinaria de institucionalización de la infancia que fijó las coordenadas dentro de las cuales los niños serían reconocidos como tales: das de la infancia moderna. Hoy, cuando esas coordenadas tambalean, otros cuerpos se hacen visibles y la infancia emerge múltiple, desconocida, desconcertante”.
“¿Qué hay de nuevo en las nuevas infancias?” de Gabriela Diker